A Joaquín Ramírez, por esos años
De desesperación que compartimos
Sin una moneda para gastar
En el monstruoso centro comercial.

I touch your book And dream of our odyssey
in the supermarket and feel absurd.
Allen Ginsberg

 

I

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Las luces de las lámparas parpadeaban sobre las baldosas negras
Las salchichas en sus empaques permanecían felices
Junto al apacible tocino que miraba a lo lejos
Los anaqueles azules donde reposaban los impenetrables huevos
El frío de los congeladores recordaba el artificio de las lejanas tardes de invierno
Y la escarcha blanca no era otra cosa que la escarcha blanca.

II

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Un lugar frio y solitario en el supermercado Baphomet
Una especie de refugio entre la multitud
Las ancianas con sus monedas y abrigos
Se preguntaban qué había pasado con la juventud
Ese joven ahí sentado absorto y desnutrido era el motivo de sus preguntas
Ellas continuaban con sus vidas
-mientras envueltas las salchichas-
Guardaban el cambio.

III

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Leyendo un libro de Arthur Rimbaud mientras masticaba un chicle sin sabor
Los altavoces anunciaban las promociones
El 2×1
El 50%
Los compradores se afanaban con sus carritos
Familias felices vestidas para la ocasión
Niño come-galletas
Y una música festiva para hipnotizar la razón
Él pasaba las páginas del libro sin la menor preocupación.

Andreas Gursky

IV

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
(…) Le travail est plus loin de moi que mon ongle
l´est de mon œil. Merde pour moi! Merde pour moi!
Merde pour moi! Merde pour moi? Merde pour moi!
Merde pour moi! Merde pour moi! Merde pour moi!
………………………………………………………
Quand vous me verrez manger positivement de la
Merde, alors seulement vous ne trouverez plus que Je
Coûte cher à nourrir!…
Se había antojado de un cigarrillo
Pero en el lugar estaba prohibido fumar
Los dependientes no dudarían en sacarlo a patadas.

V

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Cerró las páginas del libro y miró los precios
Salchichas $4.999
Tocino $8.999
Jamón $9.999
En su bolsillo solo habían $999 y media barra de chocolate con maní
Volvió a abrir el libro…
Los que pasaban lo miraban con curiosidad
Preguntándose hacia dónde iba esa pobre generación
Je parvins à faire s´évanouir dans mon esprit toute l´espérance humaine.

VI

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
A pocos metros de ahí las cajas registradoras engullían monedas y billetes
Mientras los códigos de barra agregaban pequeñas cifras a la ecuación
-También recibían bonos y tarjetas de crédito-
Y todos eran felices bajo el ojo de las cámaras que vigilaban la ociosidad del comprador
Él continuaba pasando las paginas hasta que una hoja con garabatos
Interrumpió su concentración de lector.

VII

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
La hoja llamó su atención
Era un evento curioso en aquel lugar de precisión
Los altavoces y sus cacofonías
Las luces blancas y su resplandor
Algo le hizo comprender que esa hoja era una especie de explosión
Algo sobrenatural frente al congelador que mantenía anestesiada
A las salchichas las butifarras y al salchichón
Una impredecible ruptura sin explicación.

VIII

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Un hombre de gran contextura mientras trapeaba el piso le preguntó:
<< ¿No tienes algo mejor qué hacer? Los vigilantes te tienen fichado>>
Continuó meneando el trapero mientras se perdía en el pasillo de las conservas
Él ignorando lo ocurrido levantó el papel
-Todo garabateado con su letra de adolescente-
Y leyó:

IX

Para recordar a los 28 años en alguna sección del supermercado Baphomet
En la cafetería sirven un buen puré de papa
Si algo está en promoción dentro de poco vencerá
Siempre habrá una cámara dispuesta a vigilarte
Los cajeros solo serán amables si pagas en efectivo
Los juguetes no son como los de antes
La zona de electrodomésticos es solo para adultos
-Desde el instante en que la empieces a visitar eres niño muerto-
Dos solitarios como mi amigo y yo
Solo somos dos solitarios como mi amigo y yo
Con muchos sueños y pocas monedas
El viejo que empaca la carne siempre enamora a las niñas
El mejor pan es horneado a las 10:30 y exhibido a las 11:05
Mi amigo y yo fuimos como los tipos de Mallrats dirigida por Kevin Smith.

X

Para recordar a los 28 años en alguna sección del supermercado Baphomet
En la cafetería sirven un buen puré de papa
Los lunes en la mañana son buenos para visitar la zona licor
Todos los que se sientan en la cafetería más de una hora son desempleados
La librería y la tienda de discos no merecen ser visitadas
Los solitarios del pasillo de las carnes frías me producen terror
Detrás de las blancas paredes se esconde una legión de ratas
Las he visto en el pasillo de las frutas
Los baños de este lugar son una total porquería
La mujer de la caja registradora #9 es un ángel atrapado en este supermercado infernal
El vigilante del turno de la tarde es un hijo de puta.

XI

Para recordar a los 28 años en algún sector del supermercado Baphomet
En la cafetería sirven un buen puré de papa
Nunca visites el supermercado Baphomet sin un libro en las manos
Nuestro puesto siempre fue entre las latas de frijoles y atún
Nunca mires directamente a los ojos del dependiente
Se sentirá humillado y te acusará en servicio al cliente para que te saquen
Aquí caben todos los estratos sociales
Nunca te mires en los espejos de la zona de vestiers
Una vez encontré un Gregorio Samsa en mi helado de vainilla
Las degustaciones de licor y galletas era nuestro mejor almuerzo
En la zona de zapatos se encuentran las mujeres más hermosas
En la zona de lencería siempre encontraras vejetes merodeando.

XII

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Algo en su interior se quebró
Recordaba el día y la hora en que escribió aquella nota en la sección de dulces y chucherías
Nada de aquellos años lo acompañaba ya
Su amigo se había ido
Y sus juventud y alegría habían sido vendidas en una promoción del pague 2 y lleva 3
Era uno de los terroríficos solitarios en el pasillo de las carnes frías
Uno de los que dentro de poco iría a morir al pasillo de los detergentes y los jabones
-Ese olor le recordaba a los manicomios y las morgues-
Nada le quedaba en este reino de la vigilancia y el altavoz.

XIII

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Se levantó como pudo
Miró la majestuosidad de las mortadelas de pollo
La sabrosura de las morcillas rellenas de sangre y arroz
Y la nobleza de las butifarras esperando ser comidas con mucho limón
Todo esto le parecía tan extraño
Una vida en el supermercado Baphomet y nunca había pensado en el exterior
Todo su mundo era una metrópolis de anaqueles, pasillos, promociones y productos
Sentía que el sinnúmero de colores y sabores de los empaques no era más que una ficción.


XIV

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Caminó hacia las cajas registradoras con la certeza suicida de saberse un extraño
Todo se paralizó en medio de la compra y la venta de lo prescindible
<< ¡Miren, es el loco del pasillo de las salchichas y mortadelas!>>
<< ¡Cuidado, ahí viene el loco-salchichón que no han podido sacar de aquí!>>
Frente a todos los cliente y trabajadores insensibles como maniquíes
En medio del mar de tantos productos que los hombres jamás necesitaron y jamás necesitaran
Con el libro de Rimbaud en las manos
Soltó una lágrima que resbaló con valentía por su mejilla
Una lágrima que tenía el peso de la eternidad y la rebelión.

XV

Toda la tarde del sábado sentado en el pasillo de las carnes frías
Ninguno podía creer su osadía
El atrevimiento de llorar en el reino de las risas y el consumo
El mal gusto de mostrar su dolor junto a las botellas de champaña
Él incomprendido no buscaba aceptación
Solo comprobar su teoría de que todo era una triste ficción de sumas y restas
Y cuando todos menos lo esperaban con sus billetes y tarjetas de crédito
Soltó una carcajada que se escuchó hasta en los anaqueles del champú
Y como si el mundo dependiera de ello salió por la puerta principal
Como un cliente anónimo del montón
Y entonces se rompió el silencio en las cajas registradoras
Y todo continúo como si nada en el supermercado Baphomet
La fiesta y la soledad de comprar y vender lo inútil y lo innecesario.
Toda la tarde del sábado la humanidad sentada en el pasillo de las carnes frías…

25 Octubre 2011

EL SEÑOR UNDERGROUND

Las ilustraciones son tomadas de las obras fotográficas de ANDREAS GURSKY (Las tres primeras), BOB ADELMAN (La foto en la que aparece Andy Warhol), la escultora DUANE HANSON (Mujer con el carrito); y ELIPHAS LEVI (Ilustración de Baphomet)

 

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(1981 o 1987). Agente patafísico en la ciudad imaginaria de Yellow Hell City. Fanzinero (re)negado en varios planetas del Multiverso. Fanático de los collages y los cómics de Grant Morrison y Charles Burns. Murallero crepuscular. El Amigo invisible de Rimbaud y Lautréamont.

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