Utilizando una técnica de “cut up” Mauricio Aragón mezcla fragmentos tomados de libros de Ray Bradbury y William Burroughs, de María Mercedes Carranza, de Raúl Zurita, Rómulo Bustos, de Evelio Rosero y de Jorge Franco. En la suma de las imágenes que esos textos contienen, se pretende ver una conexión que simboliza los horrores nacionales, en una singular galería de espejos.