-Los escritores son como las putas –dijo Stobbs-.
Los escritores son las putas del universo.
-A las putas del universo les va mucho mejor, amigo mío.
Charles Bukowski
-Ve allá y escandalízalos a todos.
-¿A quiénes?
-A los que creen que el mundo es nacer, crecer, fornicar y morir.
-¿Acaso eso no es el mundo?
-Eso es el mundo y más, siempre más…
-¿Cómo escandalizar a los hombres en un siglo de extravagancias y apocalipsis de supermercado?
-Estrangula al ruiseñor en las aguas del inodoro sin que alguno te vea…
-No veo el sentido de intentar escandalizar a todos con la muerte de un pajarraco y no dejar que alguno lo vea.
-Siempre hay alguien que vigila…Tu solo actúa, del resto se encargaran los chismosos…
-Jamás he visto un ruiseñor y no creo que en esta fea ciudad se consiga uno.
-¡Insensato! ¿Acaso no lo puedes ver? ¡Todo lo que te rodea es un ruiseñor! ¡Vives en el universo de los ruiseñores!
-No creo que las sucias prostitutas, los perros sarnosos y los viejos seniles sean ruiseñores. Se parecen más a buitres putrefactos estorbando en las aceras.
-El nido de los ruiseñores se encuentra en el reino de la abyección, de la soledad y la muerte.
-Viejo… habla claro… no quiero tu cháchara filosófica ¡He venido aquí para que me digas qué debo hacer para terminar de conquistar el mundo con mi escritura!
-…
-¡He venido para recibir tu bendición! ¡Dicen que eres el lector más grande de esta época!
-…
-¿Qué sucede?
-Tú escritura está muerta. Jamás has escrito con la tinta furiosa del calamar.
-¿Qué sabes tú de mi escritura maldito viejo ermitaño? ¡Jamás me has leído!
-Un escritor es más que papel y palabras, más que aplausos y banas interpretaciones metafóricas de la realidad… el escritor es una posibilidad, una en un millón de convocar al Ruiseñor de Fuego.
-¿El ruiseñor de fuego? ¡Pamplinas! ¡Viejo, ese tabaco y ese ron que te traje te han jodido la cabeza!
-…
-Vine porque me dijeron, que entre otras cosas, eres el poeta más grande y sabes como iluminar la conciencia de los escritores más jóvenes…
-Te han engañado… yo no soy el poeta más grande…
-Viejo ¿Qué quieres que te diga? No sé por qué siento que te estas burlando de mí…
-En tus ojos se nota la ambición y el desprecio por los viejos poemas sin palabras. No puedes disimular que para ti todo se basa en la publicación y la fama… ¡Eres uno de aquellos canallas que piensan que publicar es lo que hace al escritor!
-¡Mi prestigio me concede ese derecho!
-En ese caso debo decirte que mi sabiduría me concede el derecho de revelarte la verdad que te asignaron los dioses…
-¿Dioses? ¡Por favor viejo, no seas ridículo!
-¡Tu no podrás convocar al ruiseñor de fuego!
-¿Entonces Convocaré al ruiseñor de agua? Ja ja ja… ya te dije que no veo ruiseñores en este mundo de mierda…
-Por eso es que te debes resignar… con el tiempo te tocará recurrir a la extravagancia para continuar diciendo que eres escritor. Estrangula al ruiseñor…
-¡Maldita sea, viejo, ya te dije que no hay ruiseñores en esta ciudad!
-Si tu mundo es un mundo de buitres, perro y ratas… ya sabes lo que debes hacer…
-…
-Estrangula al buitre en la oscuridad. Estrangula al perro en la soledad de tu cuarto. Estrangula a la rata en el silencio de…
-¿Pero por qué demonios tengo que estrangular algo? ¿Por qué no disparar o apuñalar? ¿Qué necesidad hay de ensuciarse las manos?
-La mejor escritura se logra ensuciándose las manos con el fango de la existencia.
-…
-Posees la técnica. Conoces el orden más adecuado en que deben ir las palabras, pero nunca has ido más allá… tus paginas son asépticas… no hay fango, no hay sangre. No hay esa chispa que les demuestre a tus lectores que eres superior a ellos.
-Se nota que no sabes quién soy. Soy uno de los jóvenes escritores más importantes de mi ciudad.
-No lo dudo…
-¡Me está empezando a fastidiar tu tono!
-Tu escritura no es para ruiseñores. Escribes para gallinas extraviadas en un campo de gavilanes.
-¡Al diablo tus ruiseñores!
-No son mis ruiseñores…
-…
-¡Escucha lo que te digo, pequeño bastardo Bestseller… hagas lo que hagas no podrás invocar al ruiseñor de fuego…!
-¡Eres un maldito viejo engreído, debería mandarte a apalear!
-Eres un cobarde… tu escritura es la copia de la copia de otros que no pudieron invocar el ruiseñor de fuego…
-¡Hago parte de los artistas egregios de esta ciudad y tú solo eres un viejo envidioso al que jamás le han publicado sus poemas! ¿Qué importancia pueden tener tus palabras?
-¿Egregios? ¡La historia se encargará de catapultarlos al olvido!
-…
-La comedia de los mismos con las mismas lanzándose alabanzas en revistas, periódicos y homenajes. Si te arrodillas un poco y sabes con quien juntarte, no pasará mucho tiempo para que seas un joven egregio de la gran ciudad.
-¡Mi talento no se lo debo a nadie!
-¡Necio, lo que eres se lo debes a la historia y a sus tristes ruiseñores! Aunque en tu caso se lo debes a lo que te rodea: a los buitres y las ratas.
-¡Viejo hijo de puta, no me has dado una oportunidad de mostrarte mi talento, solo me has juzgado según tu universo de malditos ruiseñores!
-¡Recuerda que solo soy un viejo poeta inédito al que nadie llama egregio! ¿En qué te pueden afectar mis palabras si tienes la fama y el cariño del lector?
-Solo quería tu bendición…
-…
-…
-No llores, si eso es lo que quieres, te doy mi bendición… si tú mismo no lo dices, nadie se enterará de esta conversación…
-No entiendo por qué tanto desprecio…
-Eres muy joven para entenderlo… con el tiempo te darás cuenta que la escritura, la publicación y el reconocimiento solo son ilusiones encadenadas a la Gran Ilusión. En la hora del cataclismo el poeta será tan prescindible como el abogado, el albañil, el panadero y el doctor.
-…
-Mientras eso pasa, escucha mi consejo… ¡estrangula al ruiseñor!
-pero…
-Extravagancias, escándalos e irreverencias garantizan la fama que tanto te gusta y solo se consiguen estrangulando al Luscinia megarhynchos. Olvida mis palabras y dedícate a ser feliz…
-Les diré a todos que en verdad eres un gran poeta…
-No hay necesidad… No temo caer en el olvido antes que ellos, tarde o tempranos todos nos encaminamos a sus brazos con o sin resignación…
-Solo tengo una pregunta…
-Pregunta y aléjate de aquí… tu vida te espera…
-¿Alguna vez pudiste invocar al Ruiseñor de fuego?
-Si.
-¿Y qué paso?
-Lo que tenía que pasar… ¡El universo se convirtió en un incendio constante de maravillas y vuelos!
-Después de esto mi vida no será la misma. Gracias por iluminar mí acantilado…
-No te preocupes… siempre hay una salida o un letrero que dice: “Rompa el vidrio en caso de emergencia”. ¡Si no eres el mesías, estrangula al ruiseñor!
***
No basta con decir ¡ESTO ES LO QUE ME GUSTA!
No basta con saltar paredes llenas de vidrios y dejar tus tripas colgadas
No basta con escribir 100 paginas en un abrir y cerrar de ojos
No basta con leer como un poseído
No basta con dártelas de listo y conocer a un millón
No basta con publicar y ser reseñado en el periódico
No basta con ser alabado por la multitud
No basta con decir ¡YO QUIERO SER ESCRITOR!
NO BASTA.
Las pequeñas victorias que ocurren frente al papel
Las guerras internas al escribir la próxima línea
La soledad y el placer que no se comparten al crear
La rebelión del inconsciente…
Quizás eso baste
Pero todavía falta un poco más
¿Sabes de qué hablo?
¿Sabes de qué?
***
Nota-ruiseñor: ¡Si no estás conforme con lo que escribes y haces, estrangula al maldito lector! Jajajajaja (Ñañaña) (Tales Boom!!!)
EL SEÑOR UNDERGROUND
Imágenes tomadas del trabajo de Jeff Wall.